Hermanado con el mito griego, el basilisco nace del huevo que pone un gallo, en vez de una gallina. El gallo pondrá el huevo dentro del cuchu (forma asturiana de "estiércol") y con el calor de este será incubado hasta que eclosione y de él nazca el basilisco.
Hay dos versiones diferentes de su aspecto: la 1ª, en la que aparece como una serpiente con cresta de gallo que puede alcanzar varios metros de longitud, y la 2ª, aún más terrible, en la que es un gallo que en vez de plumas traseras tiene una larga cola de serpiente. En esta segunda apariencia su cacareo resultaba tremendamente dañino para los oídos de cualquier animal o persona que lo escuchase, aunque su poder era tal que tanto en una forma como en otra, podía matar a cualquier ser que le mirase directamente a los ojos.
(Mitología Asturiana)
De todo un poco. Leyendas, tradiciones e historias curiosas de todas las regiones de España. Unas son verdad y otras no tanto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario