Tiene su entrada por la calle de Fuencarral y la salida á la de San Bernardo.
Tradición.— En esta calle estaba la quinta de D. Luis Carrillo, ministro de Felipe III, y en la puerta de entrada se hallaba una pintura del Divino Pastor, alumbrada de noche por dos farolillos, como era costumbre en aquella época. Parece que la hija de un pintor llamado Gregorio Ferro, seducida por un galán, hubo de abandonar la casa paterna, y bien fuese que el amante no acudiera á la cita, bien que despreciase después a la joven, el caso es que ésta se encontró una noche perdida en aquellos contornos, habiendo decidido poner fin á sus días. Para lograrlo, se dirigió á la quinta de Carrillo con el objeto de arrojarse á una noria que allí existía; pero al ir a realizar su propósito descubrió la imagen del Divino Pastor, y arrodillándose a sus pies, imploró la divina misericordia. Al día siguiente volvió á casa de su padre, quien la perdonó; tal era el cariño inmenso que la profesaba.
La quinta fué quemada en el siglo XVII con ocasión de las revueltas políticas de aquellos reinados.
(Carlos Cambronero)
De todo un poco. Leyendas, tradiciones e historias curiosas de todas las regiones de España. Unas son verdad y otras no tanto.
Selección
lunes, 19 de febrero de 2018
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario