En 1984, con el fin de refrigerar y abastecer de agua a la Central Nuclear de Valdecaballeros que se encontraba en construcción, se levantó la presa y embalse de Valdecaballeros, pero jamás llegaron a entrar en funcionamiento ni la presa ni la central.
El embalse en encuentra situado sobre la Cuenca Hidrográfica del Guadiana. Técnicamente hablando posee una capacidad de 71 hm3 y la superficie de su cuenca es de 406 km2, recibiendo una aportación media anual de 83 hm3. Sus aguas vierten sobre el embalse García de Sola.
La presa es de gravedad y planta recta con una altura desde cimientos de 36 metros y una longitud de coronación de 487m. Dispone de dos aliviaderos para la evacuación de avenidas. El aliviadero central de la presa dispone de 14 vanos de 12,50 m de ancho cada uno, de labio fijo y sin compuertas. Sobre la presa existe un vial asfaltado que sirve para realizar labores de mantenimiento, pero jamás ha llegado a pasar sobre ella ninguna carretera.
En la actualidad la presa y el embalse se hayan abandonados y regulan el escaso caudal que acumula el rio Guadalupe. En el caso de que el embalse necesitara desembalsar, lo haría de la manera más simple posible: cuando el agua sobrepase la altura de los aliviaderos verterá sobre el embalse García de Sola. El único aprovechamiento de los terrenos del embalse en la actualidad es ganadero.
Desde distintos ámbitos asociativos se ha pedido en reiteradas ocasiones su demolición debido a que no cumple el fin para el que se construyó y su mantenimiento supone un importante daño medioambiental para el río.
Cuando aprieta la sequía, aguas abajo de la presa junto al puente por el que pasa la carretera EX-316 podemos observar un bunker abandonado de la Guerra Civil.
Extremadura Misteriosa
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