domingo, 16 de abril de 2017

Felipe II y la pensión del soldado

Solicitó un soldado de Felipe II la concesión de alguna merced por los servicios prestados por él, y el rey le concedió una renta de trescientos ducados anuales. Poco tiempo después volvió el soldado nuevamente para pedir alguna merced al rey, quien le dijo:
—¿Pues no os di ya una provisión de trescientos ducados?
—Es así, señor —respondió el soldado—. Pero aquéllos fueron para comer, y lo que ahora pido es para beber.
La sagaz contestación tuvo su efecto sobre el rey, que accedió a que recayese en el soldado un nuevo beneficio.

(Carlos Fisas)

No hay comentarios: