Parador de Arcos de la Frontera - Cádiz

Si eres amante de la singularidad de los pueblos de España y de su gastronomía, del turismo rural, de los castillos y del buen vino, el Parador de Arcos de la Frontera te encantará. Es un balcón al río Guadalete, antigua Casa del Corregidor, privilegiado mirador de la bella localidad gaditana. La situación idílica del hotel hace que sea una de las mejores opciones para disfrutar de la oferta turística de Arcos de la Frontera, uno de los lugares más visitados de la provincia. Arcos de la Frontera es la puerta a la Ruta de los Pueblos Blancos, localidades gaditanas y malagueñas que escalan entre las montañas con sus pintorescas casas blancas. También es punto de partida para las Rutas del Vino y un lugar ideal para llevar a los niños y que visiten la granja escuela de Buena Vista, la granja de Avestruces Arepao los caballos de Arcos.

Arcos te sorprenderá con sus casitas blancas, encajadas como piezas de un puzzle en la cumbre y la ladera de una peña rojiza. Aquí puedes pasar en poco tiempo de las orillas del Guadalete hasta una altura de casi 200 metros en la base del hermoso Castillo de los Duques, que mira con vértigo al río y ofrece una asombrosa panorámica. Calles empedradas y empinadas te conducirán al casco histórico, declarado Monumento Histórico-Artístico Nacional y considerado uno de los más bellos de Andalucía. Visita merecida también a la Iglesia de San Pedro y la Iglesia de Santa María de la Asunción, ambas del siglo XV.

Esta zona tiene una gran riqueza vitivinícola. Podrás visitar varias bodegas y viñedos, y catar exquisitos caldos. Si te entusiasman los deportes, y en particular los deportes de aventura, debes saber que el entorno natural del municipio permite realizar espeleología, senderismo, descenso de cañones, vuelo libre, parapente o cicloturismo. Visitar el Lago de Arcos, donde las piraguas y la vela conviven con las aves que vienen a pasar el invierno, es también una magnífica opción.

En Arcos de la Frontera experimentarás la armonía de la quietud de un pueblo, donde las gentes toman asiento a la sombra en las calurosas tardes de verano, con el dinamismo de un destino turístico único que hará que no olvides tu experiencia en este Parador.

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